Toma conciencia y escuchar esa parte de ti que no habla en el lenguaje de tu mente, sino de tus emociones, tus intuiciones, tus sentimientos…

A continuación, algunos de los bloqueos frecuentes que causan problemas de fertilidad:

  1. No es el momento adecuado… laboralmente (no tengo trabajo, o tengo demasiado trabajo), económicamente, familiarmente… Aunque esta idea es muy común, no basta con pensarlo, tiene que haber una emoción suficientemente intensa como para provocar más estrés que el hecho de no quedarte embarazada; por ejemplo, un fuerte impacto emocional por haber vivido el despido de una compañera embarazada en una situación dramática, y es esto lo que ha quedado grabado.
  2. No es la pareja o el padre adecuado, porque algo me dice que no voy a poder contar con su ayuda, sé que este hijo va a ser solo un peso, una carga y un trabajo para mí. O tal vez exista otra razón inconsciente que provoca un estrés intenso respecto al padre de ese futuro hijo, que es nuestra pareja. Puede que desconfiemos de él, que sintamos rencor, que nos haya sido infiel, que creamos que va a portarse mal con el niño o que nos abandonará cuando nazca… y como verás, muchas veces esta historia reproduce cualquier otra que has vivido antes, con tus propios padres u otros miembros del árbol genealógico. Este tipo de conflicto a menudo está presente también en mujeres que intentan ser madres solteras y no lo consiguen.
  3. Hombre peligroso o padre peligroso. Mal referente de padre. El que nos pone en peligro porque se va o incluso fallece (que no deja de ser una forma de abandono) y nos precipita al riesgo del abandono que supone carecer de la figura de padre.
  4. Madre peligrosa. Madre ausente, que ha muerto o que ha abandonado. Los referentes maternos, igual que los paternos, influyen de manera determinante cuando nos vamos a convertir en madre o padre, ya que tenderemos a repetir o a reparar esquemas, lo cual representa un bloqueo fortísimo, como el que te explico a continuación.
  5. Mal referente de madre. No me gustan las referencias que tengo como madre, mi madre ha sido una madre terrible y cuando me convierta en madre seré como ella.
  6. No quiero que se parezca a mi familia. Necesito romper con mi clan, renegar de mis genes.
  7. No quiero que se parezca a la familia de mi pareja.
  8. No quiero que mis hijos vivan lo que yo he vivido, porque es aterrador y grabamos la historia que siempre se repite… Aquí también puede haber memorias de antepasados que sufrieron guerras, fusilamientos, encarcelamientos y situaciones terriblemente trágicas.
  9. Ya soy madre, simbólicamente tengo a mi madre como hija, o a mis hermanos, o a mi padre… Soy la madre de todos, el sitio de los hijos ya está ocupado. A veces, esto ya está programado en nuestra propia concepción, en nuestro proyecto sentido. Obligación de cuidar de mis padres, de uno de ellos o de un abuelo o abuela, de un hermano… por el deseo frustrado de alguien de nuestro clan que no puede cuidar a otro. Concebida para hacer lo que mi madre no puede hacer: cuidar de su madre. Yo lo haré, así que no puedo tener hijos porque significaría “incumplir el trato”.
  10. Más conectada con la muerte que con la vida. Por alguna muerte muy traumática en nuestro entorno que nos ha dejado bloqueadas sin hacer el duelo. Porque hemos asistido a muchas muertes en nuestra vida y esos duelos están bloqueados, sin resolver, o porque compartir esa energía es una forma inconsciente de estar en contacto con los muertos. Porque fuimos concebidas para sustituir a un bebé que había muerto. Porque durante nuestra vida fetal se produjo alguna muerte muy traumática para nuestra madre y ella se quedó en esa energía igualmente. Porque en el transgeneracional de la historia familiar hay muchas muertes.
  11. Los niños se mueren. Muertes traumáticas de recién nacidos, niños pequeños, en la vida o en el transgeneracional. Abortos también. Esto implica mucho sufrimiento, y para que no se repita, no me quedo embarazada.
  12. Tengo que dar vida a otros. Suelen ser memorias de lo vivido durante nuestra concepción, nuestro proyecto o nuestra gestación. Dar vida a mi propia madre que estaba como muerta, o a un ser querido que falleció cuando mi madre estaba embarazada de mí, o a otros miembros del clan que fallecieron prematura o trágicamente y el inconsciente familiar trata de darles vida a través de mí.
  13. La pareja se muere o se marcha cuando se tiene un hijo. Revisa si hay historias de este tipo en tu árbol o en tu vida.
  14. Conflicto estético. Pienso que me pondré gorda, fea. Me parece que nadie me querrá cuando mi pecho sea voluminoso, cuando se deforme mi cuerpo y ya no resulte sexy. No le gustaré a mi pareja, sentiré vergüenza de mostrar mi cuerpo… Detrás de este tipo de conflicto suele haber algo más profundo que la estética en sí, y es que se note la tripa. Porque seguramente hubo antes algún embarazo que la madre, la abuela, la bisabuela u otra mujer de la línea ancestral tuvo que esconder (o así lo hubiera deseado)¿Cuál? ¿Por qué?
  15. Que no se repita mi nacimiento. ¿Cómo nací yo? ¿Cómo fue el parto de mi madre? ¿Hubo complicaciones? ¿Fue traumático? ¿Estaba sola? Si el primer impulso de vida va asociado a un episodio traumático, la vida se complica.
  16. El embarazo o el parto ponen en peligro tu vida o la del bebé. Embarazo o parto asociados a peligro o muerte. Quedarse embarazada es peligrosísimo y acarrea muchos problemas, incluso una posible muerte.
  17. Me he quedado sin niñez. He tenido que crecer demasiado rápido y me he perdido la infancia; me ha tocado asumir responsabilidades y madurar muy pronto, y me han privado del derecho de ser niña. Solución: no crecer. Y como la biología recibe este mensaje, a veces impide que crezcan los ovocitos o los embriones.
  18. Prohibido crecer. Tengo que seguir siendo la niña de papá o de mamá, de manera que no me puedo convertir en mujer (y tampoco en madre). Mi madre se muere si no me puede cuidar, su ilusión de vida es cuidarme como una niña, solo puedo existir como hija. No puedo ser adulta porque mis padres me dejan de querer o se
    mueren. Cualquier programa de mantenerse niña o niño, o prohibición de crecer, hace que el adulto no pueda procrear, es una forma de mantenerse en la infancia. A veces sustituimos simbólicamente a un antepasado que falleció de pequeño y se nos asigna ese rol, que debemos mantener. Por tanto, como los niños no tienen hijos, cualquier intento de concebir está abocado al fracaso.
  19. Este clan, o parte de él, tiene que morir. Por ningún medio se consigue un embarazo, ni siquiera con tratamientos. Los embriones no sobreviven, no evolucionan, para que el clan tampoco sobreviva o evolucione. Porque hay algo que ya no se puede solucionar, es necesario que muera para acabar con ello. La solución pasa por no continuar con esa especie, por no procrear. En este sentido, es muy ilustrativa la metáfora del manglar
  20. No me deseaban, como ser o como niña. Mi madre sintió: “no quiero que nazca”. Ese mensaje queda grabado en mi inconsciente, como una impronta latente que me hace no desear mi vida, porque no tengo derecho a ella ni la vida tiene derecho en mí. Suele ocurrir cuando los padres se enteran de que esperan un hijo, piensan en interrumpir el embarazo o la madre intenta provocarse un aborto.
  21. Contradicción. Sí…, pero no… En ocasiones se produce la concepción y hay un embarazo ectópico, que por alguna razón está fuera de lugar o no encuentra las condiciones necesarias y acaba en aborto. Puede ser lo mismo que nosotras sentimos en nuestra vida uterina.
  22. Incesto, seguido de embarazo. Lo que queda grabado es un rechazo al embarazo.
  23. Mujeres que están más en lo masculino que en lo femenino. Veo en lo femenino algo peligroso o sucio, o demasiado débil y sumiso. A veces hay memorias de abusos. Puede haber también desarreglos hormonales, con niveles más altos de testosterona, etc. Rechazo mi feminidad porque mis padres querían un niño y siento el rechazo como mujer.
  24. Problemas sexuales, de placer, de la energía sexual y la chispa de la vida. Aquí reside el poder de la creación. Si no tengo placer, si no me permito el placer, si no puedo disfrutar del sexo, de esa energía sexual creativa, si no me creo una diosa creadora… es muy difícil concebir una nueva vida. A veces hay relaciones sexuales vinculadas a algo terrible, una gran frustración sexual, etc.
  25. Problemas de autoestima y de capacidad para crear, bien porque nos han desvalorizado o porque nos han sobreprotegido. Yo no puedo, sola no puedo, necesito ayuda externa para todo. El poder no está en mí.